Ángelo Palacios
Twitter: @angelopalacios
El título trata de dos profesiones conocidas, pero el contenido nos afecta a todos los que de alguna forma tendremos ingresos solo por un breve periodo. El ejemplo de las profesiones de futbolistas y modelos es útil para entender claramente la importancia de distribuir en el tiempo los ingresos fuertes que se puedan tener. Todos conocemos casos de profesionales de estos rubros que terminan muchas veces en la indigencia. Fundamental así recordar siempre solo 2 cosas: 1) Nuestros ingresos son por tiempo muy limitado, 2) Nuestros gastos serán hasta el día de nuestra partida.
El crédito de hoy va para Carlos Kasuga, empresario japonés-mexicano, quien se refirió a las “estaciones de la vida financiera”. Siempre digo, que la educación financiera principal debe ser en casa, con la virtudes de templanza, prudencia, aprendiendo desde chicos a no darse el gusto en todo y a saber esperar. Así, la primera estación, “la primavera” debe ser considerada como la época de siembra, principalmente en educación. Los japoneses ubican nuestra primavera desde que nacemos hasta aproximadamente nuestros 20 años. Aquí, lo fundamental es la formación moral y académica.
Nuestro “verano”, hay que estimarlo entre nuestros 21 a 40 años. Es la estación financiera de mayor energía y producción económica. Se inician los primeros trabajos o los primeros emprendimientos, los primeros ascensos o éxitos empresariales. Aquí, dice C. Kasuga que es fundamental “ser conscientes que todo verano se acaba”, lo cual es habitualmente muy difícil de asumirlo, salvo que de pequeños esto haya sido inculcado. Aquí, hay profesiones que tienen un “verano” aún mucho más corto: futbolistas, modelos, artistas de breve éxito, grupos musicales, profesiones de alto riesgo y estrés. Así, recibir dinero fuerte en “verano” sumado a la fama, genera una fuerte presión social para gastar todo. Se debe invertir.
Algunas profesiones tienen todavía un “otoño” de ingresos: Se estima esta “estación” desde los 41 hasta los 60 años. Aquí se debe tomar conciencia que es el periodo donde aún se puede seguir generando ingresos mientras haya salud. Algunos futbolistas y modelos reenfocan su “otoño” trabajando como directores técnicos, en periodismo deportivo, en programas de televisión, o como figuras femeninas adultas respetadas para marcas según la edad y similares. En general, en este “otoño” de nuestra vida financiera se está aún bien de salud y trabajando activamente. Saber también que algunos emprendedores exitosos, “su verano” dura inclusive hasta esta época, donde siguen recibiendo frutos fuertes de sus empresas. Sin embargo, esta columna está más enfocada en los que estamos en relación de dependencia.
Así, durante los tiempos de verano y otoño, debemos indefectiblemente tomar la costumbre de ahorrar e invertir al menos un 10% cada vez que cobramos algo. Aún mejor, como dije en otro artículo, también compartir con los más necesitados otro 5% o 10%, les garantizo que esta parte regresa sin falta. Entonces, tenemos unos 40 años de vida laboral/productiva activa lo cual equivale a unos 480 meses de ingresos. Este ahorro mensual colocado a interés compuesto construye fuertes números para el momento de la llegada del “invierno”. Recordar que al comienzo el 10% de un sueldo mínimo a los 21 años de edad, parece insignificante, pero es como una semilla que luego crece en forma exponencial, para disfrutar si Dios nos da salud y vida, de un buen invierno. Gracias por sus contactos en www.revistafoco.com.py, y www.angelopalacios.com. Sigamos construyendo juntos las virtudes financieras de templanza, paciencia y prudencia.