Lograr que los empresarios tomen conciencia del valor que pueden aportar las personas con discapacidad y promover la igualdad en oportunidades son algunos de los objetivos que persigue Enrique López Arce, director general de Empleo del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social y agente de inclusión en el Paraguay.
En entrevista con Revista FOCO, Enrique comenta algunos de los pormenores de la inclusión laboral efectiva de las personas con discapacidad, los retos y satisfacciones de trabajar con este segmento de la población y nos da un panorama de un futuro laboral más inclusivo.
¿Se puede hablar de una inclusión laboral efectiva de personas con discapacidad en el país?
En primer lugar, sentimos que todavía falta mayor difusión y promoción acerca de la importancia de la inclusión efectiva de las personas con discapacidad. Vemos que las intenciones son buenas, pero muchas veces estas no se traducen en obras. Muchas empresas hablan de que hay oportunidades para este segmento; sin embargo, cuando se golpean puertas, estas no se abren.
Por otro lado, hay otras empresas que entendieron el mensaje de inclusión e igualdad de oportunidades y les fue bien. Es decir, nunca hubo quejas en torno a las personas contratadas y pudieron apreciar los beneficios de contar con personas con discapacidad en su plantel de colaboradores.
Además del incentivo fiscal ¿qué otros beneficios generan estas contrataciones para una compañía?
Por experiencia propia sabemos que estas personas son excelentes trabajadores porque valoran el doble la oportunidad que se les da, saben lo difícil que es conseguir un empleo y conscientes de esto se esfuerzan por dar lo mejor de sí mismos. Además, mejoran el entorno laboral, al ser colaboradores con ciertas limitaciones que trabajan de igual a igual con sus compañeros y se convierten en ejemplos e inspiración para los demás. Son individuos fuertes que siguen adelante y persiguen sus sueños.
También hay que entender que si la persona no está capacitada, no existen incentivos fiscales válidos que hagan que un empresario los contraten. Los empleadores buscan personas que aporten a la empresa y tengan la capacidad y actitud necesarias.
¿Cuáles son las principales dificultades para la adaptación de estas personas en el campo laboral?
Un factor importante es entender que si bien son personas que no buscan un trato diferencial, tienen desafíos diferentes, ya sea en cuanto a la movilidad, el relacionamiento o en el aspecto psicológico. Hay casos en que son emocionalmente más sensibles. Vemos que, en muchas ocasiones, tanto el empleador como los mismos postulantes no están preparados para la experiencia, es necesario un mayor acompañamiento durante el proceso de adaptación.
Otras aristas son la infraestructura y la educación. Algunos lugares de trabajo no están acondicionados para personas con ciertas discapacidades físicas y, por lo general, estas personas requieren de asistencia que antes era brindada por algún familiar o amigo.
También afecta que estas personas tienen un proceso de formación diferente. Por esta razón se requiere de actualización en la formación ya sea en oficios, aptitudes o capacidades acordes para cada rubro.
¿Cómo hacer frente a estas dificultades?
Es necesario entender y atender todos los factores que inciden en el proceso de inclusión laboral de una persona con discapacidad, que los empresarios y la gente en sí conozcan las limitaciones y competencias de estas personas.
Para afrontar el desafío de la movilidad –ante las limitaciones en infraestructura– y la asistencia de algún familiar, existen más de 5.000 empleos en Contact Center, donde estamos desarrollando un proyecto para capacitar y contratar a personas con discapacidad para que tengan la posibilidad de trabajar desde sus casas siendo formales, con un salario mínimo, seguro de IPS y todo lo que dicta la Ley.
Incluso, los interesados en trabajar en el área de Contact Center pueden acercarse a la Oficina de Empleo y vemos para generar una oportunidad con un grupo importante del sector de la salud.
¿Cuál es el promedio de duración en los puestos de trabajo de estas personas con discapacidad?
Tenemos casos como el de Jessica Cabral, que perdió un brazo, pero que aun así no fue una limitación para que ella pudiera trabajar ya hace un año como auxiliar administrativo, y otros que estuvieron entre seis y siete meses. La tasa de rotación es igual a la de los jóvenes de entre 20 y 23 años que prueban con el primer empleo porque se requiere de ese proceso de adaptación y prueba que resultan más difíciles para algunos.
¿Las contrataciones responden al nivel de capacitación que poseen estas personas?
Sí. En todos los casos se consideró la capacidad y lo que estas personas podían aportar a la empresa para contratarlas. Esto creo que es lo que todos buscamos, tanto el empresario que persigue un objetivo y estas personas que no desean ser contratadas por solidaridad, sino por lo que pueden contribuir.
¿Cuántas personas con discapacidad fueron insertadas al sistema laboral a través de la Oficina de Empleo?
En promedio logramos la inserción de una persona con discapacidad por mes, cuando no hay ferias o convocatorias. Desde el 2016 realizamos cinco ferias de empleo para personas con discapacidad y en el 2018 convocatorias puntuales con algunas empresas. Estamos trabajando para ampliar el número de oportunidades brindadas, pero necesitamos concientizar a los empresarios.
En cuanto a la cantidad de personas que aguardan por un empleo, ¿qué datos se manejan?
En la Oficina de Empleo tenemos recepcionadas 200 hojas de vida de personas que se han capacitado y están a la espera de una oportunidad laboral.
¿Existe un proceso para la selección de estas personas?
El proceso empieza con la carga asistida de los datos personales y profesionales de cada postulante, luego pasan por tests laborales que contemplan exámenes de inteligencia, personalidad, memoria, audición, así como pruebas proyectivas y de conversación para determinar las capacidades para el trabajo de estas personas.
Normalmente trabajamos con la Fundación Saraki que dispone de una persona que realiza el seguimiento a la empresa y a los chicos. Para los postulantes que llegan por primera vez se les recomienda que asistan a cursos en la fundación; una vez que pasan por esa etapa, son agregados con alta prioridad para contratación.
Con miras al futuro, ¿cuáles son las expectativas para la inclusión laboral en el país?
A futuro hay una oportunidad gigante. Los empleos del futuro se relacionan con el teletrabajo, donde las posibilidades son mayores para insertarse en el sector privado. Además del área informática. Un factor fundamental es que los interesados en incursionar en el mercado laboral aprendan computación, eso amplía el espectro de probabilidades de ser contratado.
¿Qué hace falta para que las empresas tengan mayor compromiso con la inclusión?
Que pierdan el miedo y los prejuicios en torno a trabajar con una persona con alguna discapacidad. Aunque exista cierta reticencia, deben probar con pasantías educacionales para comprobar el bien que pueden generar tanto en el trabajo diario, en el cambio de mentalidad y en todo el equipo humano. En el sector privado sucede que al no contar con una legislación que exija la contratación de personas con discapacidad, se depende de la buena voluntad del empleador o propietario.
Desde la Oficina de Empleo, ¿qué proyectos tienen a futuro para este segmento de la fuerza laboral?
Impulsar el teletrabajo, nosotros creemos que se puede aumentar bastante el empleo privado potenciando el hecho de que trabajen desde su casa. Otro objetivo es tener una base de datos de personas con discapacidad en todo el país. Contamos con la página web Paraempleo y las oficinas, pero sentimos que hay ciudades a las que no llegamos. En este sentido, también tenemos el gran desafío de encontrar nichos de mercados para personas con discapacidad en las zonas rurales, porque hoy casi todo se concentra en las zonas urbanas.
¿Un mensaje final?
Falta mucha más conciencia, hay gente que quiere y que se merece oportunidades. Debemos reconocer que son personas muy valiosas para el sistema.
PERFIL
  • Director de Empleo del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
  • Licenciado en Administración de Empresas.
  • Especialista en el Área Comercial Nacional e Internacional.
  • Especialista en inversiones, zonas francas y maquila para desarrollo económico.
  • Autor de libros del Área Comercial Nacional e Internacional.
  • Encargado de Desarrollo de Proyectos Económicos para empresas nacionales e internacionales.
  • Máster en Gobierno y Gerencia Pública por la Universidad Americana.
  • Especialista en Operaciones Comerciales Internacionales en Swift, Brasil.
  • Diplomado en Planificación Estratégica por la Universidad Americana.
  • Diplomado en Gerencia Financiera por la Universidad Americana.