Para avanzar en este objetivo, Enrique Biedermann, presidente de LIDE Comunicación, comparte algunas recomendaciones para construir un estilo de management inclusivo que permita a los colaboradores sentirse únicos, pero al mismo tiempo, parte del grupo.
1. La diversidad es lo “normal” hoy en día: Entender y respetar la diversidad del mundo en el que vivimos es esencial para poder liderar y evolucionar positivamente en el día a día. Vivimos en una era donde la información y el conocimiento están al alcance de todos; para poder tener una visión global de todo lo que acontece tenemos el gran desafío de generar equipos y ambientes de trabajo donde convivan personas de distintas edades, nacionalidades, sexo, religión, etc.
2. Influenciar: Un buen líder logra influenciar a su equipo para obtener buenos resultados. Para ello se debe tener el expertise necesario en los temas a tratar, captar su atención y lograr que nos tomen con seriedad y generar la confianza necesaria para que crean en el líder. Se debe tener muy en cuenta que los objetivos de todas las partes estén alineados para lograr que las personas den lo mejor de ellos mismos.
3. Ser curioso: La curiosidad no es un defecto en un líder. Por el contrario, el hambre de conocimiento y las ganas de entender más sobre diversos temas convierten a las personas en gente interesante. Un buen líder genera cercanía con su equipo, sabe hacer las preguntas adecuadas para poder mantenerse al tanto de lo que ocurre y, sobre todo, sabe escuchar y observar.
4. La conciencia: En un mundo cada vez más diverso y de mayor relacionamiento intercultural y multidisciplinario debemos ser extremadamente conscientes de que el liderazgo ya no es una cuestión de imposición sino que de adopción. Lograr que las personas te adopten como líder requiere de entendimiento, conciencia y respeto a las diferencias de las distintas personalidades. La empatía y el poder llegar a conseguir una relación interpersonal valiosa con gente de diferentes edades, creencias y gustos es una experiencia muy rica que nos ayuda a todos a crecer como seres humanos.
5. Inteligencia emocional y cultural: Cada vez estamos más necesitados de estar mejor educados, conocer diferentes culturas, viajar y saber cómo manejarnos en diferentes ambientes. La inteligencia emocional para poder aplicarnos límites a nuestros pensamientos y acciones, el sentido común para poder tomar las decisiones correctas son absolutamente imperativas para poder desarrollar el liderazgo.
6. Construir ambientes colaborativos: Generar una cultura colaborativa con el objetivo de compartir lo mejor que cada miembro del equipo pueda ofrecer. Aprender a utilizar y aprovechar el talento individual para el éxito comunitario es clave en el desarrollo del Liderazgo Inclusivo.
7. Orientación al crecimiento: Todo líder debe estar enfocado al crecimiento sostenido. Cuando hablo de crecimiento sostenido no me refiero solo al crecimiento del negocio o al crecimiento económico sino que al crecimiento individual de cada persona y de cada equipo de trabajo en particular.
8. Protección... sin favoritismos: Proteger al equipo y los talentos que lo conforman sin generar favoritismo o una empatía mayor con alguien que la conforma es una tarea muy difícil, pero fundamental para poder liderar con igualdad. No es tarea fácil, pero debemos ser capaces de separar las cuestiones.
9. Generar Confianza: No existe el liderazgo de ningún tipo sin confianza.
10. Pasión: Este último tip es muy personal. Se que no es una gran exclusividad, pero personalmente me gusta ponerle mucha pasión a todo lo que hago. Transmitir esa pasión a los demás hace que el trabajo pesado del día a día se convierta en algo más placentero. Y disfrutar del trabajo le da un valor adicional a nuestro valor como personas.
