Ya sea para marcar un inicio ordenado en la actividad comercial o para atraer nuevos inversionistas, contar con un plan de negocios es la ruta para obtener los resultados. Por esta razón compartimos un esquema que permitirá escribir con éxito un plan, según la revista Entreprenur.com
1. Investiga: Es necesario conocer íntimamente a tu empresa, el producto que ofreces, la competencia a la que te enfrentas y el mercado. Es decir, investigar todo sobre lo relacionado a la empresa y el rubro.
2. Determina el propósito de tu plan: El plan de negocios es un documento escrito que describe la naturaleza del negocio y las estrategias de gestión internas, que pueden tener varias finalidades, es necesario determinar qué es lo que tu empresa necesita en este momento y direccionar el plan a la consecución de esa meta.
3. Crear un perfil de empresa: Este apartado incluye los datos de historial de la empresa, los productos o servicios que ofreces, tu mercado y audiencia objetivo, tus recursos, estrategias para resolver eventuales problemas y para fortalecer el factor diferenciador que haga único a tu negocio.
4. Documenta todos los aspectos de tu negocio: Para atraer inversionistas es necesario contar con registros que avalen la rentabilidad de tu negocio y detalle las proyecciones de la industria.
5. Ten un plan de marketing estratégico: Toda gestión empresarial incluye un plan de marketing para fortalecer el alcance al público. Este plan debe responder el qué y el por qué de las tareas de mercado, y el quién, dónde, cuándo y cómo para las áreas prácticas.
6. Hazlo adaptable en función de tu audiencia: Los lectores potenciales de un plan de negocios son un grupo variado, desde banqueros de capital de riesgo hasta empleados. Aunque este es un grupo diverso, es finito. Y cada tipo de lector tiene ciertos intereses básicos. Si conoces estos intereses por adelantado, debes estar seguro de tenerlos en cuenta cuando prepares una versión de tu plan para cada audiencia en particular.
7. Explica por qué te importa: Ya sea que estés compartiendo tu plan con un inversionista, cliente o miembro del equipo, debes demostrar que eres apasionado y dedicado, y que realmente te preocupa tu negocio. Puedes hacer una lista de los problemas que esperas resolver, describir los valores de tu empresa y establecer qué te hace destacarte de la competencia.
Al explicar por qué te importa tu negocio, creas una conexión emocional con otros para que apoyen a tu organización en el futuro.