Si bien es cierto que en los últimos años la industria paraguaya creció, con la energía abundante que el Paraguay posee, podría dar un salto mucho más significativo e incidir en el desarrollo del país. Desde la Unión Industrial Paraguaya esta es la visión que se busca impulsar.
Hace rato que el sector industrial del país se viene consolidando. Hoy se produce más y con mejor calidad, y se han conquistado grandes mercados internacionales. Además los industriales trabajan cumpliendo con todas las formalidades de la ley, invierten en infraestructura, generan empleos y buscan estrategias para ser cada vez más competitivos.
Para Gustavo Volpe, quien desde el 10 de abril pasado asumió la presidencia de la UIP, este trabajo serio que ha encarado el sector industrial, ya es reconocido y visible, incluso en el exterior. Pero la industria tiene aún mucho más que aportar al desarrollo del país. En esta entrevista concedida a FOCO, explica cuáles son las principales expectativas del gremio empresarial, próximos a un cambio de gobierno.
¿Cuál es su expectativa al asumir la presidencia de la UIP?
Después de haber estado seis años fuera del gremio y a casi dos meses de haber reasumido la presidencia, me estoy readaptando, conociendo más a fondo cómo está hoy el sector industrial en general y cómo está la UIP que hoy tiene -en cuanto a su administración- un tamaño muy importante, precisamente para acompañar el crecimiento que registra la industria. Contamos con más de 200 funcionarios, es decir que la propia administración de la UIP requiere de mayor atención que en otras épocas. Tomemos en cuenta que la UIP es un gremio que presta servicios a sus asociados, por eso necesitamos que todas las personas que componen nuestro equipo de trabajo estén dispuestas a lograr el objetivo de atenderlos bien. A ello apuntamos. Tenemos expectativas positivas de continuar realizando un trabajo eficiente al servicio de nuestros socios.
Frente al cambio de gobierno ¿Qué esperan?
Vemos que hay posibilidades de poder interactuar con las nuevas autoridades del Poder Ejecutivo y también del Congreso. Esto es muy alentador porque nosotros como Unión Industrial debemos trabajar de cerca con las autoridades nacionales. Precisamente, todo lo que hace la UIP está orientado a crear conciencia en los gobernantes. Con ello tratamos de convencerlos de que el sector industrial paraguayo está llamado a corregir el grave problema que tiene la economía paraguaya, que es la falta de empleos. No existe otro sector de la economía que pueda encarar mejor ese problema. Por ello, vamos a trabajar con las autoridades para tratar de convencerlos de esta situación. Hay que hacer crecer el sector industrial y felizmente en estos últimos años esto se viene logrando.
¿Cuánto creció el sector industrial?
Hubo un crecimiento importante en cantidad, pero sobre todo en calidad. Tenemos que tener en cuenta que la industria en los últimos años ha venido creciendo un 10% por encima del crecimiento del PIB (Producto Interno Bruto). Aunque estas cifras se convierten en una buena noticia, es todavía insuficiente. Lo decimos desde el punto de vista de que el Paraguay tiene una herramienta fabulosa que es la energía hidroeléctrica y en abundancia. A partir del 2023, lo ideal sería que eso se direccione hacia la industria y nos basamos en algunos estudios que hablan que si eso ocurre y se impulsa al sector industrial con ese “hermoso oro transparente” que tenemos, podríamos cuadruplicar el PIB en menos de 20 años. Eso nos demandará un gran trabajo y requerirá que el país se disponga y decida a utilizar esta herramienta para el desarrollo. Aquí hablamos del desarrollo industrial no como un fin en sí mismo, sino como una herramienta para lograr el desarrollo de la economía nacional.
¿Las empresas maquiladoras, qué peso tienen en ese crecimiento del sector industrial?
Hay que reconocer que uno de los aspectos que ha impulsado el crecimiento del sector es la maquila. Las industrias maquiladoras se han constituido en Paraguay y han contribuido fundamentalmente para generar nuevos empleos, algo que precisa el país. Desde ese punto de vista nos parece muy bien que se siga apostando a la industria maquiladora y que se continúen generando puestos de trabajo. Ahora, una cosa es la industria maquiladora, y, otra la industria tradicional o las nuevas industrias, que podrían venir al país. Si nosotros realmente usamos el criterio de que queremos el desarrollo industrial utilizando como herramienta la energía abundante que tenemos, obviamente eso estará determinado por la industria tradicional. Si bien la maquila también debe seguir creciendo, nuestra visión es que debemos generar industrias que estén al 100% con todas las condiciones que debe tener una empresa industrial.
¿Qué beneficios traen las industrias tradicionales?
Lo que tienen la industrias tradicionales es que aportan al fisco, aportan a los ingresos del Estado que tanta falta le hace a Paraguay para que pueda cumplir con su rol principal de proveer de salud, educación, infraestructura a la población.
¿Mayor infraestructura y condiciones para la inversión sería el principal reclamo del sector?
Si, condiciones para la inversión y direccionar la energía eléctrica como una palanca para el crecimiento industrial y a través de eso el desarrollo de la economía. Si la economía nacional se desarrolla, se agranda la torta, y eso a su vez genera mayores ingresos al fisco, lo que también permite que pueda cumplir su rol de manera más eficiente.
Siempre se habla de la necesidad de recursos humanos específicos para el sector industrial ¿qué ha hecho la UIP al respecto?
Nosotros podemos decir orgullosos y sonrientes, de que la UIP está trabajando seriamente en el tema de la capacitación. Tenemos en primer lugar el Instituto Técnico Superior que pertenece a nuestra fundación CEPPROCAL (Centro Paraguayo de Productividad y Calidad) que brinda cursos de capacitación para mandos medios. Convertimos técnicos en menos tiempo de lo que normalmente el sector público lo hace. Logramos duplicar la cantidad de horas cátedra y en ocho meses contamos con nuevos técnicos, y sobre todo estamos capacitando gente en una área muy importante para la industria que es la mecatrónica. Todos sabemos que las maquinarias de hoy en día utilizan la mecánica, la electricidad y la electrónica, y justamente hacemos especial hincapié en ello para que año a año vayan surgiendo nuevos mecatrónicos en el Paraguay. También tenemos cursos para otras disciplinas, como los destinados a formar los recursos humanos que necesitan las industrias farmacéuticas del país.
La Universidad Paraguayo Alemana que impulsó la UIP, ¿qué ventajas ofrece?
La UPA nos permite tener técnicos universitarios altamente calificados para trabajar en el sector industrial. Hay que resaltar que esta universidad es la primera de Alemania en el exterior. Quienes egresan de esta institución tienen un doble título, el paraguayo y el de Alemania que los habilitan a trabajar en cualquier parte Europa.
Se acerca la Expo ¿cuál es la imagen que desea proyectar el pabellón de la UIP?
Yo soy un amante de la Expo. Desde hace mucho tiempo vengo acompañando esta muestra, pasé por todos los cargos e incluso llegué a ser coordinador general y también me involucré en su organización desde la presidencia de la UIP, cuando me cupo. Siempre señalo algo y este 2018 lo digo nuevamente: Esta será la mejor Expo hasta ahora. Porque esta muestra es fiel testigo de los cambios que tuvo el Paraguay tanto en la producción primaria, la producción pecuaria, como también en la industria y eso se ve reflejado en la “Expo nacional del trabajo”. Año a año, se ven progresos, por eso tiene tanto éxito y sigue vigente con el correr del tiempo. Es como la sustituta de las fiestas patronales que antes existían, porque finalmente es una fiesta de la familia paraguaya. Por eso se hace coincidentemente con las vacaciones de invierno, para que todas las familias tengan la posibilidad de ir a disfrutarla.
¿La Expo ha contribuido a la marca país?
Por supuesto. La marca país se pudo vender mejor y sobre todo últimamente ha cambiado la visión sobre Paraguay. La visión en el mundo ya no es la de aquel país del contrabando, la piratería y el lavado de dinero. Hoy se habla mucho más respetuosamente del Paraguay, se lo destaca como un país que trabaja, que produce. Este trabajo serio se viene haciendo hace tiempo, pero lastimosamente, solía prevalecer la imagen de cosas que pasaban en el Alto Paraná, como la tringulación y otros males que aunque siguen existiendo, se demostró que los paraguayos de bien pueden producir, tener industrias creativas, y que pueden tener la mejor carne del mundo. Esos negocios de frontera, que muchas veces ni siquiera están hechos por paraguayos, han perjudicado al país. La expo es la mejor comprobación del buen trabajo que pueden hacer los paraguayos.
En materia de innovación, ¿cómo está la industria?
Nos falta muchísimo. Es una materia pendiente y la UIP está haciendo esfuerzos importantes para tratar de adquirir la gimnasia y trabajar fuertemente en la innovación. Sabemos que es un tema principal para las industrias y para cualquier empresa, sin importar su tamaño. Incluso para la casa y las instituciones educativas. Hoy en día, si nosotros podemos encaminar nuestra ayuda hacia las mipymes para que metan la innovación dentro de su estructura iremos avanzando. Un profesional de una Universidad de Chile que trabajará para adentrar a la empresas en el tema de innovación, nos decía que no se trata solamente de transformar, sino de cambiar el chip mental. Vamos a trabajar fuertemente para incorporar la cultura de la innovación en las empresas paraguayas.
¿Un mensaje final?
Todos los paraguayos debemos cambiar. Así como se ha cambiado la visión en el exterior sobre el Paraguay, internamente también lo tenemos que hacer. Tenemos que erradicar flagelos muy terribles para la industria paraguaya, como por ejemplo el contrabando, la informalidad o la evasión impositiva. Lastimosamente hay todavía un porcentaje muy importante de la economía paraguaya que se mueve en negro. Hay que erradicar esa informalidad, causada fundamentalmente por el contrabando que mete cualquier producto al país, sin cumplir ninguna ley fiscal o las normas de consumo humano o regulaciones en materia comercial. Los empresarios en general tienen que asumir la responsabilidad de trabajar con la gente formal, que opera dentro de la ley, que paga sus impuestos. Si nosotros damos ventaja a los delincuentes, a los evasores, a los contrabandistas, o los que negocian con drogas, el país no podrá bajar sus niveles de pobreza.

Perfil

Licenciado en Contabilidad, Administración y Economía.
Hizo cursos de posgrado de Contabilidad de Costos en Inflación y de Administración Industrial. Fue presidente de la Unión Industrial Paraguaya –UIP- de marzo de 2006 a marzo de 2012. Miembro fundador de la Comisión de Industrias Plásticas del Mercosur –COMINPLA. Vicepresidente del Consejo Empresarial de América Latina CEAL – Sección Nacional Paraguaya. Presidente de la Federación de la Producción, el Comercio y los Servicios FEPRINCO por el sector Industrial. Presidente de Plásticos S.A.
CEO de Molecor Titan
Director General de Luxacril S.A.
Presidente de Sinpa S.A.
Presidente de ECOPLAST S.A.
Actual presidente de la Unión Industrial Paraguaya.